Adjunto a continuación mi trabajo realizado para la PEC4, en el cual intenté aplicar todos los consejos que se me dieron desde el aula para mejorar mi propuesta inicial de la PEC 3.
Seguí con el proyecto del Real Jardín Botánico de Madrid, el cual me parece un espacio muy interesante con el que trabajar. Enlace
En esta primera fase del proyecto se nos mandó realizar un estudio para abarcar la conceptualización y la estrategia a seguir en el rediseño de la señalética de un lugar.
En mi caso me he decantado por rediseñar un lugar que siempre me ha gustado visitar, el Real Jardín Botánico de Madrid. Un espacio con mucha historia y que a mi parecer, cuenta con una señalética que puede ser actualizada para así aportar más valor al usuario.
Especialmente he incidido en las diferencias entre las plantas y como los usuarios pueden conocer información acerca de las mismas. Al ser un espacio con un público objetivo fragmentado, lograr unas señales que se adapten a todos ellos es clave para lograr los objetivos.
Además, consideré que unificar criterios era importante y por esa razón analicé espacios similares para poder generar ideas que mejoraran lo implementado en el espacio.
Considero que los supermercados son lugares en los cuales la señalética y la distribución de los elementos en el espacio es clave para que los clientes logren encontrar los productos que andan buscando.
Además, esta distribución no suele estar colocada de forma arbitraria, sino que las secciones están ordenadas de tal manera que se favorezca la compra por impulso y que el consumidor tenga que recorrer la mayor parte del local, incitando una vez más a la compra no prevista.
Después de esta introducción-reflexión, a mi amigo le encargaría comprar el pan, una tarea cotidiana: A: ENTRADA – B: PANADERÍA
“Dado que la estructura del supermercado es rectangular y la panadería se encuentra en la esquina superior izquierda si imaginamos el plano desde la entrada, indicaría a mi amigo que se fije en un elemento pasivo tan distintivo como el pasillo largo, el cual sin pérdidas le llevará al fondo del local.
Por el camino se encontrará información activa poco relevante para su búsqueda, ya que simplemente son señalizaciones de otras secciones.
Ya en el fondo del local si tendrá que hacer caso de la información activa, fijándose en la señalización de la panadería, perfectamente visible desde la sala en la que se encuentra.»
Por último, le indicaría que siguiera el camino en sentido anti-horario desde la panadería, para llegar rápidamente a las cajas, una vez más observando como el espacio le invita a dar más vueltas de las necesarias si no sigue las indicaciones que le recomendé”.
Conclusiones: La estructura de los supermercados suele estar señalizada con grandes carteles que indican los bloques de comida principales, por lo que fijarse en ellos es vital para no dar vueltas de más.
Sin embargo, los productos de compra diaria suelen situarse en zonas alejadas de la entrada para obligar al usuario a comprar de más. Se busca priorizar el deseo a la necesidad. Así, el pan está situado en una esquina al final del supermercado. Entras solo a por pan y sales con la bolsa llena.
Algunos productos los cambian periódicamente de sitio para obligarte a hacer más recorrido por el super y que tengas que ver prioritariamente las cabeceras varias veces
Adicionalmente, debido a los tiempos en los que vivimos, se han añadido señalizaciones para evitar aglomeraciones y lograr que la distancia de seguridad se mantenga, aunque al estar en el suelo, pude apreciar que no son todo lo visibles que deberían.
Esto demuestra que muchos establecimientos no están adaptados a la nueva realidad, ya que las aglomeraciones a la hora de comprar siguen siendo habituales, por mucha señal que se incluya. Aun siguiendo las indicaciones, los lineales dan poco margen para cumplir las normas.
¿Qué pensáis vosotr@s de la distribución de los supermercados? ¿La distribución es cómoda o se priorizan otras cosas? Os leo!